Trastornos de la Alimentación
Actualmente tenemos una cultura altamente obsesionada con la comida y el peso, y los patrones desordenados de alimentación son muy comunes. Cuando estos patrones desordenados empiezan a interferir en la vida cotidiana de la persona es cuando aparecen los trastornos de la conducta alimentaria (Anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y trastorno por atracón).
Los trastornos de la conducta alimentaria se pueden desarrollar por una combinación prolongada de factores emocionales, psicológicos, interpersonales, sociales y conductuales. Una vez comienzan, pueden desatar un ciclo de destrucción física y mental. Es por este motivo que es muy importante la detección precoz de los mismos. Estos trastornos suelen ser más frecuentes en mujeres, comenzar en la adolescencia y con frecuencia se presentan con depresión, trastornos de ansiedad y consumo de drogas.
Por otro lado, hoy en día nos encontramos con un problema social muy importante como es el sobrepeso y la obesidad. Las principales consecuencias de las mismas residen en el incremento del riesgo de desarrollo de diabetes, trastornos del aparato locomotor, de cáncer (como el de mama, colon y endometrio) y de enfermedades cardiovasculares. El riesgo de contraer estas enfermedades aumenta con el incremento del peso corporal.
El sobrepeso y la obesidad generan un efecto negativo en las personas, con una enorme carga psicológica causado por las consecuencias psicosociales que esta enfermedad conlleva. Además, las personas con sobrepeso habitualmente tienen dificultades para conectar adecuadamente con las emociones.